Alberto Espeso Fernández (Oviedo, 1998) ha cerrado escasamente hace un mes una larga trayectoria de 17 años en el Sporting de Gijón. Tras cumplir con éxito todas las etapas de formación, debutó con apenas 17 años y aún en edad juvenil en el filial rojiblanco, en Segunda B. Y ya desde el curso 17-18 pasó a ser un fijo en el segundo equipo de Mareo, con el que en su primer año de sénior disputó el play off de ascenso.
Después de una segunda campaña, algo más modesta en cuanto a resultados colectivos, en el Sporting B, en verano de 2019 le llegó la oportunidad de dar el salto al primer equipo, tras convencer a José Alberto durante toda la pretemporada. De hecho, el técnico ya sabía de sus prestaciones de la etapa conjunta en el filial, hasta el punto de que nada más llegar al Sporting el diciembre anterior ya tiró de él para la vuelta de dieciseisavos de la Copa del Rey ante el Eibar en Ipurúa (2-2 y pase gijonés).
Sin embargo, al final esa ha sido la única aparición de Espeso en el primer equipo del equipo de su vida. El pasado curso, ni el propio José Alberto ni Miroslav Djukic le dieron un solo minuto, tras confiar durante toda la temporada en el argentino Damián Pérez y en Carlos Cordero. Una situación que, coincidiendo con la finalización de su contrato, ha terminado por cerrar su etapa en El Molinón. Ahora, el futuro del zurdo estará en El Arcángel, pues la dirección deportiva del Córdoba ya ha atado su contratación.
Desde SOLO-SPORTING le deseamos mucha suerte a Berto Espeso, que siga creciendo como futbolista y por qué no, que algún día pueda volver al Real Sporting y competir por un puesto en el lateral zurdo.
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